Mantecados de aceite de girasol (¡sin manteca de cerdo!)

En mi búsqueda de una receta de mantecados que no llevasen entre sus ingredientes manteca de cerdo (la odio mucho, muchísimo!!!) me encontré con esta propuesta de Comoju. Esta semana probé su receta, y el resultado merece la pena!! Me permití la licencia de cambiar el aceite de oliva por aceite de girasol, que a mí me gusta más para la repostería. También le añadí, para aromatizarlos, zumo de naranja y anís.

Para los mantecados de aceite:

380 g de harina
200 g de azúcar
180 ml de aceite de girasol
3 cucharadas soperas de zumo de naranja
3 cucharadas soperas de anís

Lo primero que tenemos que hacer es "secar" la harina en el horno, para que nuestros mantecados nos queden con una textura que se desmigue un poco. Para ello, la ponemos en la bandeja del horno a 150º, unos 20 minutos. (No se tuesta, sólo oscurece un poco) La dejamos enfriar del todo. Al secarse, pesará un poco menos. La mía se quedó en 360 g.
Precalentamos el horno a 200º.
Batimos el azúcar con el aceite, el zumo y el anís. yo lo hice en mi thermomix, 30 segundos a velocidad 4.
Incorporamos la harina y la mezclamos hasta tener una masa arenosa, a la que parece que le falta líquido. TMX: 6 segundos a vel.6)
La sacamos a la encimera sobre un papel de hornear y la vamos juntando y apretando con las manos, dejándola en una capa gruesa, entre uno y dos centímetros de espesor

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Vamos cortando mantecados con un cortapastas y los ponemos en la bandeja del horno, sobre papel de hornear. (Yo los transporté a la bandeja con el mismo cortapastas para que no se me deshicieran por el camino)
Pintamos con huevo batido y espolvoreamos azúcar y canela. Bajamos la temperatura del horno a 170º y los horneamos 12 minutos, si nos gustan blanditos, o 15 si los queremos "para mojar".

 Los dejamos enfriar en la misma bandeja, porque en caliente son bastante frágiles.

Podemos servirlos así, o espolvorearlos con azúcar glas, a vuestro gusto. Personalmente, yo soy más de la versión con azúcar glas... ¡Y con una tacita de chocolate, claro!