No soy muy aficionada a hacer bollería, pero estas napolitanas de chocolate lo merecen. Cuando estuvimos en Londres, hace unos años, nos alojamos por la zona de Victoria Station. El hotel era uno de esos cutres con moqueta y un millón de escaleras (sin ascensor, of course!) y aunque llevaba desayuno incluído, después del primer día no nos quedaron más ganas de volver a probarlo. En la misma calle había una pequeña cafetería donde una chica francesa servía café y bollería de elaboración propia. Los croissants y las napolitanas eran fabulosos, gorditos y hojaldrados.
Esta receta me recordó justo esa textura, cuando los desayunábamos aún templaditos y con el chocolate derritiéndose en la boca. Eso sí, es mejor consumirlos en el día, ya que, como toda la bollería casera, pierde mucho en sabor y textura de un día para otro. Si nos sobran, es mejor congelarlos.
Para las napolitanas: (o croissants!!)
500 g de harina de fuerza
200 ml de leche tibia
100 ml de agua
65 g de azúcar
25 g de levadura fresca
250 g de mantequilla (para hojaldrar)
Huevo batido (para pintarlos)
Onzas de chocolate para el relleno
Almendra laminada y azúcar glas para la decoración
Ponemos la harina y el azúcar en un cuenco en forma de volcán y vertemos los líquidos y la levadura desmigada en el centro. Mezclamos todo hasta que esté homogéneo y la amasamos en una superficie enharinada unos diez minutos.
En Thermomix: mezclamos la mitad de la harina con la levadura 5 segundos a velocidad 6. Añadimos el resto de la harina, los líquidos y el azúcar y mezclamos otros 5 segundoa a vel 6, Amasamos 6 minutos en vel. espiga.
La pasamos a un cuenco grande engrasado, la tapamos con un paño humedecido y la dejamos reposar en un lugar templado hasta que duplique su volumen. (sobre 1 hora)
Mientras tanto, ponemos la mantequilla entre dos papeles de hornear y la aplanamos con el rodillo hasta dejarla de 5 mm de grosor. La metemos en la nevera hasta que la vayamos a usar.
Amasamos un minuto la masa ya levada sobre la mesa enharinada y la estiramos dándole forma de rectángulo. Sobre este rectángulo, ponemos la lámina de mantequilla y doblamos los dos extremos hacia el centro. La extendemos con el rodillo, la doblamos de nuevo y la volvemos a extender. Repetimos la operación dos veces más.
Cortamos la masa por la mitad y extendemos cada parte hasta dejarla de unos 5 mm de grosor. Cortamos rectángulos, ponemos sobre un extremo un trozo de chocolate y los enrollamos sobre sí mismos.
Precalentamos el horno a 200º. Pincelamos con huevo batido las napolitanas y las espolvoreamos con almendra laminada. Las horneamos entre 15 y 20 minutos, hasta que estén bien doraditas.
¿Qué sería de un buen desayuno dulce sin una napolitana de chocolate? ¡Si es que son ideales!
ResponderEliminarBesotes :)
Madre mía Paula!!! Las fotos dan fe de lo exquisito de esta bollería: el hojaldre, magnífico.
ResponderEliminarUn abrazo.
Quizás las napolitanas de chocolate junto con el tiramisú y la tarta de queso sean de mis postres/bollos preferidos...estas fotos son pecado mortal, tienen una pinta para comer 5 y reventar¡¡¡
ResponderEliminarenhorabuena, ahora mismo solo visualizo un café con una de tus napolitanas¡ 1 para llevar por favor¡¡
feliz finde
nata
natalialuzentupelo.blogspot.com.es
Las napolitanas de chocolate o de crema son para no parar de comerlas nunca, a mi me gustan muchísimo y estas tienen una pinta que te mueres jajaja Viva la operación bikini. Un besazo
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